22 septiembre, 2015

Aprender a levantarse

Dedicado a los que se caen y luchan contra viento y marea por levantarse.

¿Te has caído en algún momento de tu vida? No te preocupes, nos pasa a todos. Algunos caen de vez en cuando y otros lo hacemos más a menudo, pero no existe nadie en el mundo que se libre de ello.

Existen todo tipo de caídas y para todos los públicos y gustos: algunas no hacen daño e incluso tienen su gracia, hasta puedes compartirlas con tu entorno.

Pero cuando la caída es de aúpa, duele y de qué manera. Estas no tienen tanta gracia, por no decir que carecen de ella, y son las que más nos cuenta compartir con la gente que nos rodea.

Vivimos en una sociedad en la que, parece que llorar no está bien visto. Todos tenemos derecho a ser felices pero también a tener momentos de bajón, de soledad y de reflexión. ¿Por qué nos empeñamos en pensar que esto no es lo adecuado? Quizás sea el impulso que nos permita estar bien mañana y es tan válido como estar siempre con la sonrisa en la cara.

Ahora bien, ni por asomo debemos quedarnos estancados en estos estados de ánimo. Hay que armarse de valentía y aprender a levantarse, hay que aprender a ser resilientes. No podemos vivir en una eterna depresión sea cual sea el motivo que se esconde detrás de nuestra tristeza.

Desde aquí, si estás pasando una mala racha, te animo a que reflexiones y de verdad pienses si merece la pena vivir así. Es un proceso muy largo y nada fácil pero, ¿acaso hay algo fácil en esta vida? Sí, rendirse, pero no es una opción.
Coge fuerza de donde creas que no la hay, afronta los días con la mejor de tus caras y aprende a ser la mejor versión de ti mismo.


Mr.Wonderful



Cris 

03 septiembre, 2015

¡Bienvenidos!

No sabéis lo contenta y emocionada que estoy de que este día haya llegado. Llevaba meses rondando por mi cabeza la "descabellada" idea de abrirme un blog. Y lo de descabellada no lo digo porque ser blogger o creador de contenido sea una locura ni muchísimo menos; va mucho más allá de todo eso.

Estoy casi segura de que todos tenemos dos Pepitos Grillos particulares en nuestras vidas: el Majo, que es aquel que nos hace ver lo mejor de nosotros mismos y el Rancio, que viene a ser todo lo contrario. Pues bien, mi Pepito Grillo Rancio es la peor y más rancia versión que os podáis imaginar; posee la capacidad de hacerme sentir insegura en todas y cada una de las situaciones que se presentan en mi vida cotidiana. Tiene además la fea costumbre de repetirme que "no valgo para esto" y en esta ocasión no iba a ser menos. Hasta hace cosa de un mes solía preguntarme que para qué me iba a abrir un blog si no iba a aportar nada nuevo al mundo blogger (ni al mundo en general) y me amargaba la existencia cada vez que formulaba la dichosa pregunta.

Afortunadamente, mi Pepito Grillo Majo que habitualmente se encuentra en la sombra, un buen día decidió armarse de valor y decidió echarme una mano en todo este asunto. Se puso serio y me dijo: "quizás no tengas nada nuevo que aportar pero todos tenemos derecho a expresarnos y a luchar por lo que queremos. Si de verdad esto es lo que quieres, lúchalo". En su día decidí prestarle atención y escuchar sus sabios consejos. ¿El resultado? "Las Ojeras de mi Panda".

Sólo puedo dar las GRACIAS a toda la gente que a través de sus ánimos, de su cariño y de su confianza me han dado el empujón para sacar fuerzas y llegar hasta aquí. No pretendo que esto crezca como la espuma y tener miles de seguidores (aunque para qué os voy a mentir, sería todo un sueño) pero si pretendo crear un rinconcito en el que poder expresar todo aquello que siento.


Todos sois bien recibidos así que si os gusta y os sentís cómodos podéis acompañarme a lo largo y ancho de mi camino.

¡BIENVENIDOS Y GRACIAS!

Os mando un besazo de Oso Panda gigaaante.


Cris